Reseña: Los futbolísimos. El misterio de los árbitros dormidos.
Por Samuel García (1ºB)
El protagonista se llama Francisco, su equipo de fútbol se llama Soto Alto y va el último de la liga. Le quedan tres partidos de los cuales tienen que ganar uno para no descender. El equipo desaparecería si no ganaban. En el primer partido iban ganando 1-0 pero de repente el árbitro se durmió y entró un árbitro suplente y perdieron por su culpa. En el segundo partido pasó lo mismo: iban ganando pero el árbitro se durmió y entró el suplente. Empataron 1-1. Y en el tercer partido se descubrió quién era el culpable: el árbitro suplente, que era estudiante de Química y echó un tranquilizante en el agua al árbitro para que se durmiera. Al final el partido fue suspendido pero la Liga de interrecreos dijo que aunque perdieran o ganaran seguirían estando en la liga, con lo cual consiguieron que no desapareciera el equipo.